A Rosa Devés
31 mayo 2022Hace justo 100 años, en 1922, Amanda Labarca se convirtió en la primera mujer en dictar una cátedra universitaria en América (de Psicología en el Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile). Un siglo después, la misma casa de estudios elige por primera vez a una mujer –la gran Rosa Devés- como su rectora.
Rosa Devés ha contado que el impulso decisivo para presentar su candidatura fue el apoyo de un conjunto de académicos y académicas que firmaron una carta de adhesión. Esta masiva adhesión, especialmente de un grupo de mujeres, la llevó a percatarse de que, sin su candidatura, sería imposible que una mujer llegara a la rectoría (al menos en esta elección, ya que los demás candidatos eran hombres).
La fuerza de las mujeres cuando nos unimos para impulsar a otra mujer es suprema. Esta energía imparable no es antojadiza, es el resultado de comprender que –al menos hoy- no da igual quién esté al frente de las organizaciones. La participación de las mujeres en las esferas de liderazgo es crucial para la visibilización de otras mujeres. Y no solo para identificar competencias, habilidades y talentos. También para ver y combatir sesgos de género que minan la igualdad de oportunidades.
Esta doctora en bioquímica y miembro de la Academia Nacional de Ciencias se suma a otras rectoras de instituciones de educación superior como Natacha Pino (de la Universidad de Aysén), Marisol Durán (UTEM), Elisa Araya (UMCE) y Loreto Ferrari (AIEP), entre otras.
Otra reflexión que nos provoca la elección y el proceso hasta que se convirtió en candidata Rosa Devés, se refiere a una cierta tendencia por la cual las mujeres tendemos a mirar aquello que nos falta antes que nuestros méritos y competencias a la hora de asumir grandes desafíos. Sea por un exceso de celo y responsabilidad, sea por el hecho de que somos relativamente nuevas en las esferas de poder, el hecho es que muchas mujeres nos pasamos un riguroso test antes de dar grandes pasos. Quizás es este cuestionamiento profundo -que pone la valla tan alta- el que garantiza el profundo compromiso que asumen las mujeres al frente de las organizaciones.
Felicitaciones Rosa Devés Alessandri por esta elección y mucho éxito en este nuevo desafío. Eres una inspiración y un orgullo. Y gracias por convertirte en un símbolo porque solo podemos ser aquello que podemos ver.
Carolina Martínez
Presidenta de REDMAD
Artículos relacionados
Gobierno corporativo, compliance y sabiduría ancestral: responsabilidades y oportunidades para un liderazgo ético
Día del Marketing 4 de noviembre: la evolución del marketing en los últimos 20 años y sus desafíos actuales