Eugenia Hernández Grbic: “Me estoy dando el tiempo de hacer las cosas que siempre quise hacer”

29 septiembre 2022

Tiene 37 años de trayectoria profesional y actualmente es coach ejecutiva. Antes de independizarse fue directora ejecutiva de la Fundación de Capacitación Bomberos de Chile durante diez años. “Es lo más desafiante que he tenido que hacer en mi vida profesional”, afirma.

Eugenia Hernández Grbic estudió Administración de Personal en la Universidad de Santiago. Su primer trabajo fue en una consultora de recursos humanos, donde estuvo siete años, y de ahí en adelante se desempeñó en gerencias comerciales en L’Oréal, El Mundo del Vino, Salcobrand y Librerías Antártica. “Siempre he estimulado a las personas que han trabajado conmigo, y eso me dio fama de ser buena para armar equipos”.

Después, entre 2008 y 2018, estuvo a cargo de la Fundación de Capacitación Bomberos de Chile, que es una organización sin fines de lucro. “Vendíamos capacitación a las empresas grandes de Chile, que debían tener una respuesta para la emergencia. Al mes me dijeron que adicionalmente me tenía que hacer cargo del Centro de Entrenamiento de Bomberos de Chile”, recuerda, “toda esta experiencia es lo más desafiante que he tenido que hacer en mi vida profesional. Todo lo que aprendí antes lo puse en práctica ahí. Me relacioné con bomberos de todo el país, desde autoridades a voluntarios”.

Experiencia en un mundo masculino

Sobre su tiempo en Bomberos, dice que fue de mucho aprendizaje. “Me encantaba mi trabajo, conocí una institución maravillosa y aprendí lo que es dar desinteresadamente. Cuando uno tiene un trabajo con sentido no se cansa y da la pelea. Conocí personas increíbles, prácticamente todos hombres, con fuerza, garra y vocación”, dice.

Durante este tiempo trabajó directamente con el presidente nacional de Bomberos de Chile, quien fue un tutor y mentor. “Me enseñó a templarme, a tener cuero duro, a ser paciente, a observar, a quedarme callada, y a fortalecer mi capacidad estratégica. En gerencias comerciales hay que ser dinámica, proactiva, por lo que esta experiencia me equilibró. También aprendí a enfrentar situaciones de microagresiones. Para Bomberos la autoridad se gana, y yo me tuve que ganar su respeto. Lo logré, pero me costó, porque no partí en igualdad de condiciones”.

Recuerda: “Me tuve que poner bototos, casco y ser firme. Viví una experiencia que pocas mujeres tienen, que es trabajar durante diez años con puros hombres. Me di cuenta de todas las cosas que a ellos les faltan, como la templanza o dar espacio para otras visiones, igual que nos faltan a nosotras cuando somos solo mujeres, como tener más enfoque a la acción. Me permitió valorar la complementariedad de género para el éxito de los equipos de trabajo. Cuando encuentras el equilibrio, y armas un equipo con todo eso, es más fácil conseguir resultados”.

Carrera independiente

En 2018 Eugenia se independizó. Tenía 55 años y no quería esperar a los 60 para decidir qué hacer con su futuro, así que decidió certificarse como Coach Ejecutiva en la Universidad Adolfo Ibáñez. Cuando terminó, llegó la pandemia. “Aprendí lo que era la humildad y dejar que las cosas fluyeran. Mis hijos se casaron, así que quedé sola. Fue un desafío importante, con un aprendizaje profundo”, afirma.

Actualmente, trabaja como coach ejecutiva y como académica en la empresa española The Valley Digital Business School, varias consultoras y directamente en empresas. También hace voluntariado: es mentora de WoomUp, Mentores de Impacto y ComunidadMujer, y también en causas propuestas por la Corporación, como el programa de Sence para emprendedoras. “Me estoy dando el tiempo de hacer las cosas que siempre quise hacer”, dice.

Eugenia es socia REDMAD desde hace cuatro años. “Fue encontrar un tesoro para mí, le tengo mucho cariño a la red. En los momentos en los cuales más necesité compañía siempre había alguien con quien conversar y trabajar en los proyectos de la red”. Ha sido facilitadora de círculos durante cuatro años. También trabajó en la creación de las mesas temáticas, ha sido madrina de nuevas socias, fue vocera de Slack cuando se implementó, estuvo en el equipo de fidelización de socias, integró la Comisión de Ética, ha sido mentora de programas de REDMAD y apoyó al comité de consultoría.

Ahora participa como consultora y directora de proyectos. Le tiene, además, un cariño especial al club de lectura que inició en 2019 dentro de la red junto a Carolina Martínez. “He aportado ideas y tiempo. Creo que las mujeres más grandes tenemos la responsabilidad de dejar bien constituida la red, porque muchas mujeres vienen detrás de nosotras y van a necesitar un lugar de contención. Aún nos falta mucho por avanzar”, afirma.

La brecha de tiempo

Eugenia dice que los hombres tienen a su favor la forma de enfrentar las situaciones y conseguir sus objetivos en forma planificada y claramente enfocados. “Las mujeres no vemos con claridad el futuro profesional y no lo exploramos. Por esto, no tenemos un plan de carrera desde el inicio y generalmente los ascensos y cambios van saliendo producto del día a día. Ahí tenemos una brecha de tiempo que le damos a los hombres como ventaja para entrar más rápido al primer nivel de jefatura”, afirma, “¿mi consejo para las mujeres? Párate, mira y decide qué es lo que quieres. Lo importante es que sea tu decisión, que las cosas no te pasen, sino que seas proactiva, las trabajes y las logres”, expresa.

Para desconectarse, Eugenia visita a Valentina, su nieta de dos años y medio, una vez a la semana. “Esto lo hago desde el día uno. Le enseño cosas, bailamos, jugamos… Es una luz en mi vida”, dice. También disfruta mucho leer. “Soy un ratón de biblioteca. Soy muy estudiosa de temas relacionados con mi trabajo, de desarrollo de carrera ejecutiva, y me gusta la historia novelada. Soy fan de la revolución francesa”.