Flexibilidad Laboral y Género: Estudio binacional entre Chile y España aborda los beneficios y oportunidades del teletrabajo para empresas y ejecutivas en un futuro post crisis sanitaria

08 junio 2021

La investigación desarrollada de manera conjunta por REDMAD y EJE&CON muestra una valoración positiva del trabajo a distancia, no obstante, también revela importantes retos a futuro en materia de corresponsabilidad y liderazgo. En este artículo, las líderes del proyecto, Juanita Rodríguez, directora de la Corporación y María Ana Matthias, miembro del equipo de Comunicaciones, comentan los principales resultados.

Estudiar los avances de Chile en materia de flexibilidad laboral, el impacto del teletrabajo en las mujeres ejecutivas durante la pandemia y las modalidades adoptadas por las empresas para enfrentar la crisis sanitaria. Esos fueron algunos de los objetivos del Estudio de Flexibilidad Laboral y Género Chile-España, desarrollado por REDMAD y la asociación española EJE&CON, y liderado por las socias Juanita Rodríguez, Verónica Matte y María Ana Matthias y la investigadora Mónica Guzmán.

La investigación consideró una etapa cuantitativa, con encuestas a 445 ejecutivas y 145 empresas en Chile y España. Además, incluyó una etapa cualitativa, que se desarrolló a través de entrevistas en profundidad a un total de 24 empresas en ambos países.

“Este estudio nos permite revisar el camino recorrido por las empresas en estos meses de pandemia y vislumbrar las oportunidades de desarrollo que hoy tienen las organizaciones para ser agentes relevantes en la construcción de entornos laborales sostenibles. Hoy, tenemos el deber y la oportunidad de integrar plenamente el talento femenino, mediante el desarrollo de políticas públicas y corporativas que permitan compatibilizar la vida laboral y personal”, explica Juanita Rodríguez, directora de REDMAD y una de las líderes en la realización del estudio en Chile.

Los beneficios del teletrabajo

De acuerdo al estudio, el 92% de las empresas encuestadas en Chile y el 95% de las empresas en España consideraron alguna modalidad de trabajo remoto, ya fuera en su totalidad, o bien, implementando estrategias combinadas.

La investigación mostró una visión positiva respecto a la flexibilidad laboral: “Hay una visión compartida entre empleadores y mujeres ejecutivas en que la flexibilidad laboral –expresada en teletrabajo– trae múltiples beneficios, aunque tanto el contenido como la significancia de esa percepción difiere entre ambos grupos”, dice Mónica Guzmán, autora del estudio.

Para las empresas encuestadas el teletrabajo ha permitido una mejor conciliación y calidad de vida, disminución del ausentismo laboral, mayor productividad y una mejor estructura de costos. Es más, un 83% de las empresas españolas y un 62% de las chilenas está dispuesta a adoptar alguna forma de flexibilidad laboral post crisis sanitaria. No obstante, reconocen que estas intenciones aún no se traduce en políticas tangibles y en sistemas de gestión definidos.

En el caso de las mujeres encuestadas, un 81% de las ejecutivas en Chile y un 71% de las españolas trabajaron a distancia durante las primeras etapas de la crisis sanitaria, migrando luego a modalidades mixtas: presencial y teletrabajo. El 76% de las chilenas encuestadas y el 79% de las españolas, evalúa su experiencia muy positivamente.

Para las ejecutivas en Chile, la flexibilidad laboral encuentra su validación como una modalidad de trabajo deseable en el ámbito de las relaciones familiares, ya que, pareciera estar apalancada en sus beneficios emocionales. En España, en tanto, las ejecutivas valoran contar con mayor libertad para disponer del tiempo propio para realizar hobbies y estar con la familia.

Corresponsabilidad: la deuda en Chile

En ambos países la experiencia de teletrabajar durante la pandemia se ha caracterizado por jornadas laborales extensas e inarticuladas. Es decir, las ejecutivas trabajan más de 8 horas diarias en horarios donde tienen más espacios para hacerlo. Sin embargo, la principal diferencia entre Chile y España tiene que ver con la distribución de las tareas en el hogar.

En el caso español, la distribución de tareas vinculadas al cuidado y la crianza de los hijos tiende a estar más balanceada en la pareja. Mientras en Chile, sólo el 37% de las entrevistadas declara compartir el cuidado de los hijos con su pareja, esta cifra llega a un 58% en España. En tanto, el 43% de las ejecutivas chilenas comparte el entretenimiento de los hijos, mientras el 64% de las ejecutivas españolas comparte este rol con sus parejas.

Los desafíos de la flexibilidad laboral

El estudio además identifica desafíos para la implementación exitosa del teletrabajo. Más del 60% de las ejecutivas considera que los empleadores implementarán alguna forma de flexibilidad laboral en el futuro. No obstante, para que esta modalidad sea sostenible a largo plazo, las mujeres directoras de ambos países consideran que es necesario que tanto el Estado como el mundo privado asuman un rol en la regulación de estas formas de trabajar, por ejemplo, en la definición de la jornada y conciliación.

Otro de los desafíos tiene que ver con el estilo de liderazgo necesario para desarrollar el trabajo a distancia, donde el conocimiento mutuo entre líder y sus equipos, la contención y la resiliencia cobran una mayor importancia. Así lo afirma María Ana Matthias, socia de REDMAD y una de las líderes del equipo que desarrolló el estudio en Chile.

“La implementación de la flexibilidad laboral obliga a las empresas a definir sus objetivos de manera clara y que las personas trabajen por resultados. Se necesita un tipo de liderazgo cercano y que cree confianza. En este contexto REDMAD ha desarrollado un modelo de liderazgo inclusivo que apunta a administrar el disenso, inspirar y a hacer de la diversidad un motor de desarrollo para las organizaciones”, concluyó.