Nueva tendencia empresarial global se enfoca en priorizar la salud mental de los trabajadores

23 mayo 2023

La bangladesí británica Poppy Jaman, CEO global de MindForward Alliance y ex directora ejecutiva de City Mental Health Alliance UK, es una de las grandes promotoras de esta iniciativa. “El que un líder se muestre vulnerable es un mensaje muy claro de que la salud mental no es un signo de debilidad”, afirma.

Poppy Jaman, la directora ejecutiva global de MindForward Alliance y ex directora ejecutiva de City Mental Health Alliance UK, está poniendo la salud mental de los trabajadores en el centro de un movimiento empresarial global.

Así lo afirma en el artículo “Liderar con compasión: priorizar la salud mental en el lugar de trabajo” de McKinsey y lo explica en esta entrevista con REDMAD. Ella es bangladesí británica, por lo que conoce varias realidades a nivel mundial. “La salud mental ha sido nombrada por los institutos globales como la Organización Mundial de la Salud, la OECD y el Foro Económico Mundial como la próxima pandemia global. Ya era un tema importante antes de la pandemia y ahora creció significativamente”, advierte.

– Poppy, ¿por qué es importante priorizar la salud mental en los trabajos?
– Los lugares de trabajo tienen un rol clave en esta pandemia global de salud mental, porque si generan consciencia sobre esta a través de sus negocios y directores ejecutivos, capacitan a sus gerentes y tratan a los jóvenes de una manera considerada, lograrán diseñar trabajos que efectivamente mejoren el bienestar personal y no creen una cultura de horarios fuera del trabajo o metas irreales que pongan presión en las personas. Además, muchos lugares de trabajo, especialmente las empresas grandes, entregan seguros de salud que permiten apoyar no solo sus negocios, sino que también a la nación, entregando salud mental para la gente que trabaja y también para sus amigos y familiares.

En muchas culturas, como la mía, vivimos en hogares multigeneracionales, con abuelos, papás, hijos y nietos, por lo que otro motivo por lo que la salud mental en los lugares de trabajo es importante, particularmente para las mujeres, es porque si nuestros hijos o padres no están bien no vamos a rendir en el trabajo, porque tenemos preocupaciones adicionales. Entonces, si los trabajos pueden hacer un espacio para educar sobre salud mental y la prevención del desarrollo de enfermedades mentales, va a ser positivo para la sociedad.

– ¿Qué tan diferente es esto para mujeres y hombres?
– Tradicionalmente, en el 90% del mundo, según mi experiencia, la carga y la responsabilidad para la salud de la familia, educación de los hijos y esas tareas recaen en las mujeres. Yo también lo he experimentado y creo que, por la manera en que socializamos, somos mejores conectando y buscando apoyo entre nosotras. Los hombres, en cambio, globalmente tienden a buscar menos ayuda y a estar menos conectados entre ellos, entonces hay diferentes temas donde sus enfermedades mentales pueden convertirse en problemas mayores y llegar a un punto de crisis donde buscan ayuda.

En este sentido, las fuentes de estrés son más específicas para los hombres, mientras que las mujeres tenemos la presión constante de lidiar con múltiples estreses acumulativos, por lo que el lugar de trabajo puede quitar parte de esa carga dándonos espacio y reconociendo que tenemos un rol más grande en nuestras familias y que trabajar largas jornadas no es factible por los elementos de la vida que nos sobrecargan.

– ¿La gente es más consciente ahora del rol de la salud mental?
– Absolutamente, he estado trabajando en salud mental por 26 años y antes todos creían que nos referíamos a enfermedades. Ahora la mayoría de la gente entiende que puede ser algo positivo también, al igual que pasa con la salud física. Uno de los grandes cambios de las últimas décadas es el mayor entendimiento de que todos tenemos salud mental, y algunas veces esta está muy buena pero otras veces -particularmente ahora post pandemia, donde hay mucho estrés, agotamiento y cansancio- está buena o no tan buena. Hoy más gente comprende que puede hacer algo para desarrollar una buena salud mental en sus vidas, en vez de pensar automáticamente que salud mental es igual a enfermedad mental.

Otra cosa es que hay un gran estigma, ya que en todas nuestras culturas y lenguajes hay palabras groseras y dañinas para describir la salud mental, que se dicen en broma o para herir. Ahora más gente está siendo más considerada con lo que esto significa, por sus experiencias o de sus familiares, y se lo están tomando más seriamente.

– ¿Qué pueden hacer los líderes para mejorar la salud mental de sus trabajadores?
– A nivel personal, pueden ser más vulnerables y honestos sobre sus problemas, hablando de su propia salud mental y lo que los mantiene bien y les hace mal. Es decir, que cuenten en voz alta, particularmente los hombres, sobre sus complicaciones en el trabajo, presiones familiares o cargas financieras, y que todas estas cosas les han causado dificultades en su desempeño. El que un líder se muestre vulnerable es un mensaje muy claro de que la salud mental no es un signo de debilidad, sino que estas cosas pasan y pueden abordarse de manera positiva.

La otra cosa positiva que pueden hacer es contar qué apoyo buscaron cuando pasaron por un periodo difícil. Yo hablo abiertamente de que he hecho terapia a lo largo de mi vida y que hice coaching para ayudarme en mi carrera profesional como mujer, cuando mis hijas eran pequeñas y estaba haciendo malabares entre ser una madre y una directora ejecutiva. Podemos hablar también de cómo nos ayudaron los amigos, si nos tomamos un tiempo libre para recargar energías, si hicimos ejercicio o yoga, si meditamos, y si tenemos espiritualidad o una religión, que es otro factor protector para la salud mental. Se trata de hablar de periodos vulnerables en tu vida y qué hiciste para superarlos, de manera de normalizar esta conversación. Esto les da permiso a las próximas generaciones para ser abiertos.

A nivel de cultura empresarial, la mayoría de las empresas con las que estoy trabajando, que son las top 100 en el mundo, han hecho de la salud mental un tema en la agenda de la sala de juntas y han fijado la meta de fomentar el bienestar y cuidar a los empleados. Saben que, si se preocupan de ellos, los empleados son más leales y productivos, por lo que mejora el desempeño de su negocio y los hace una compañía atractiva para talentos nuevos. Así también aumenta el reclutamiento y la retención de gente talentosa. Los líderes pueden mirar estas empresas y quedar a la cabeza del juego, convirtiendo la salud mental en un tema de la sala de juntas y viéndola como una estrategia de negocios, más que de recursos humanos.

– ¿Cómo aportan las mujeres en la salud mental de los trabajos?
– Leí una investigación muy interesante donde se destacaba que la tendencia de las mujeres a colaborar, hacer redes, apoyarse entre pares y crear comunidades es instintiva y, por ende, es un factor social que aportamos automáticamente en las organizaciones. Si miras eso como un conjunto de habilidades que tienen las mujeres, y consideras la información sobre los factores protectores para las enfermedades mentales, donde el apoyo de pares es uno de los factores correlacionados, uniendo ambas cosas, definitivamente habrá un mejor desempeño y una mejora en la cultura, lo que creará organizaciones mentalmente más saludables. Por el otro lado, crear una cultura de negocios mentalmente saludable definitivamente atraería a más mujeres, generando un mayor rendimiento de las empresas, porque tendrían diversidad de pensamiento en un mundo donde los negocios son globales.