Reactivación económica post pandemia: la oportunidad de avanzar hacia una economía verde
29 julio 2020En momentos en que los países discuten sus estrategias para recuperarse del impacto económico del Coronavirus, ha surgido la pregunta sobre qué prevalecerá ¿la urgencia por retomar el crecimiento o la de impulsar un desarrollo sostenible que frene los efectos del cambio climático? Conversamos con Pamela Poo, coordinadora política de Chile Sustentable y Sandra Riquelme, consejera SOFOFA y socia REDMAD sobre el camino que debería tomar Chile en materia medioambiental.
«Es momento que el país desarrolle una ruta concreta para avanzar decididamente en una estrategia de reactivación económica que fomente la inversión sustentable», Sandra Riquelme, consejera SOFOFA y socia REDMAD.
“Ahora cuando planeamos volver lentamente al trabajo e invertir miles de millones de euros para reiniciar nuestra economía, debemos evitar caer en viejos hábitos contaminantes. En cambio, deberíamos volver mejores de esta pandemia”. Ese fue el llamado que realizó Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, a través de un video grabado en en Bruselas sobre el papel del Acuerdo Verde Europeo en la recuperación económica.
Hoy cuando los países se encuentran desarrollando sus planes de reactivación económica para enfrentar el impacto de la pandemia en materia de crecimiento y empleo son múltiples las voces que instan a aprovechar esta crisis para transitar hacia una economía verde.
Sandra Riquelme, con amplia experiencia como gerente corporativa de sustentabilidad en diversas empresas mineras, consejera SOFOFA y socia REDMAD, está de acuerdo con esta visión y afirma que “ya no es posible volver a una economía como la que traíamos hasta antes de la pandemia”. A su juicio, “es momento que el país desarrolle una ruta concreta para avanzar decididamente en una estrategia de reactivación económica que fomente la inversión sustentable, por ejemplo, en la innovación de economía circular. El modelo del derroche debe transformarse en una economía colaborativa, de aprovechamiento de los recursos, y en definitiva, de respeto al planeta”.
Para Pamela Poo, coordinadora política de Chile Sustentable, el contexto mundial y nacional abre una posibilidad para que el país dé un salto hacia un proyecto de desarrollo que permita superar el extractivismo. “Muchos ya están hablando del hidrógeno verde o azul, de las energías renovables, de la restauración de suelos, que son elementos verdes que van a generar un movimiento de capitales”, explica.
Los retos locales frente al cambio climático
“Si bien Chile es un país que aporta poco en la emisión de gases de efecto invernadero, se encuentra en una situación de fragilidad frente a los efectos del cambio climático”, afirma Sandra Riquelme.
En esta línea, Pamela Poo afirma que el país no solo debe avanzar en estrategias que permitan contribuir efectivamente a revertir el calentamiento global, sino que también a mitigar los impactos en la población. “Se deben desarrollar políticas de resiliencia. Probablemente la gente que está a la orilla de playa no va a poder vivir ahí mucho tiempo más. Tenemos que prepararnos para el desembarco de esta nueva realidad”, advierte.
«Algo que Chile tiene que resolver ahora ya es el tema de las zonas de sacrificio. Este es un un problema ético y moral. Si no se hace cargo de esta realidad, ¿cómo se puede hablar de un desarrollo sustentable?”, Pamela Poo, coordinadora política de Chile Sustentable.
Cómo avanzar hacia el futuro
Pamela Poo plantea que en materia medioambiental, Chile se posiciona internacionalmente “como un país bien portado”. Sin embargo considera que la Ley de Cambio Climático que actualmente se tramita en el Congreso se queda corta ante los desafíos globales y que en el mismo país, aún hay temas que se deben resolver con urgencia.
“Algo que Chile tiene que resolver ahora ya es el tema de las zonas de sacrificio. Este es un un problema ético y moral. Si no se hace cargo de esta realidad, ¿cómo se puede hablar de un desarrollo sustentable?”, cuestiona Poo.
Para Sandra Riquelme también es necesario incorporar la participación activa, previa y vinculante de las comunidades en el desarrollo y evaluación de proyectos, pero también en una mirada compartida del territorio. Junto a ello, afirma, que ahora es el momento para que las empresas pasen del discurso a la acción.
“Tengo la convicción que las empresas chilenas hoy comprenden lo importante que es la sostenibilidad en su negocio. Tenemos compromisos socio ambientales establecidos y en línea con los mejores estándares internacionales, la pregunta es cómo estos se materializan en las operaciones que ocurren en el territorio, y crean una riqueza justa. Las empresas vienen evolucionando desde un relacionamiento comunitario paternalista, a un modelo socialmente inteligente basado en el conocimiento, respeto y aplicación de los derechos humanos, pero ya no tenemos mucho tiempo y debemos acelerar el paso”, advierte Riquelme.
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