Teresa Youlton: “Mujeres y hombres somos complementarios, y en esta complementariedad está la riqueza”
03 julio 2023Es ingeniera comercial, con experiencia en recursos humanos, head hunting y financiera. En 2020, junto a su socia, fundó su propia consultora en gestión de recursos humanos, Youlton + Ganderats, espacio donde ha crecido tanto personal como profesionalmente.
Teresa Youlton estudió ingeniería comercial en la Universidad de Chile durante los 80. “Me eduqué en un medio muy masculino, en esa época que éramos poquitas mujeres. Tenía profesores que hacían comentarios del tipo: ‘Oiga, usted tiene que trabajar más porque le quitó el puesto a un hombre’”, recuerda.
Ella divide su trayectoria laboral en dos períodos. El primero, relacionado al mundo financiero, donde trabajó en empresas como los bancos Santiago y Santander. “Era un mundo súper masculino y tuve la bendición de tener mujeres en puestos más altos y muy potentes. Fueron un referente súper importante”, recuerda.
El segundo tiempo de su carrera estuvo ligado a recursos humanos, área en la que hasta el día de hoy se desempeña y le apasiona, desde hace más de 18 años. Entre 2012 y 2014 fue manager de recursos humanos en Colliers-International, para luego migrar a Page Executive y posteriormente a Korn Ferry.
Así, en 2020 y junto a Rosario Ganderats, quien también es socia REDMAD, fundaron Youlton + Ganderats, consultora en gestión de recursos humanos y selección de ejecutivos. “Con Rosario nos conocimos hace 18 años, cuando me integré a este mundo del head hunting”, recuerda.
A mediados de junio, la consultora cumplió tres años. “Nos ha ido bien, decidimos que queríamos ser una empresa con alto foco en la calidad y servicio al cliente. La diversidad, la meritocracia y trabajar colaborativamente con nuestros clientes es parte de lo que predicamos. Así, tratamos de presentar listas de candidatos finalistas con la mayor cantidad de mujeres posibles”, cuenta.
La complementariedad de género
Si bien Teresa se define a sí misma como feminista, comenta que “por sobre todo, creo en la meritocracia, en todo sentido: en la diversidad de género, edad, educación, estudios y contexto sociocultural”. Bajo esta premisa, ingresó a REDMAD a fines de 2018, donde ha participado como expositora de la instancia Café con Head Hunters, además del comité de admisión de socias, espacio donde lleva tres años.
Para Teresa, la misión de REDMAD y la presencia de mujeres en cargos de alta dirección “tiene toda la relevancia del mundo. Las mujeres podemos tener las mismas capacidades técnicas que un hombre, pero nuestras habilidades son distintas. Somos complementarios, y en esta complementariedad está la riqueza”, comenta.
En cuanto a su propósito, tanto personal como profesional, Teresa cuenta que una de sus principales motivaciones es hacer un cambio profundo: “Busco hacer un cambio en mentalidad y en políticas públicas, porque falta mucho. Creo que hay que educar a los hombres, educar a los empresarios y educar a las mujeres. Todos tenemos derechos y deberes por igual”, comenta.
En esta misma línea, la ingeniera comercial recalca la importancia del networking y de no restarse de instancias participativas para las mujeres: “Los hombres son muy buenos armando redes, profesionales y sociales, pero las mujeres muchas veces nos restamos porque nos da lata, o porque preferimos ver a nuestros hijos o al marido. Yo no digo que vayan siempre, pero que vayan lo más que puedan, porque en la medida que tú te muestras como persona, no solamente como profesional, generas vínculos y eso te va dando visibilidad”.
Desde hace 3 años, Teresa es miembro del directorio del Santiago College Alumni Association, organismo con foco social, pero que también es socio del colegio. “Damos becas a hijos de exalumnos que están pasando por problemas económicos y también hacemos otras actividades sociales en general, con la comunidad de menos recursos en Lo Barnechea. Todo esto requiere de bastante trabajo y levantar recursos”, indica.
Los viajes y el arte
Actualmente, los dos hijos de Teresa viven fuera de Chile, por lo cual durante los últimos años ha viajado mucho para visitarlos. De hecho, viene llegando de Nueva York tras asistir a la graduación del doctorado de su hijo. “Yo podría jubilarme pero no tengo ninguna intención, y con Rosario armamos el negocio de tal manera de que ambas tuviéramos la flexibilidad de delegarnos los proyectos y salir por períodos”, cuenta. También tiene una perra que la acompaña: “Tengo una mascota que es de mis hijos, una anciana de casi 15 años que se llama Guatona, bautizada por ellos”, cuenta entre risas.
En cuanto a sus pasatiempos, Teresa destaca la cocina y el arte. “Recientemente descubrí el arte. Yo creo que en este mundo tan masculino donde trabajé nunca me conecté con actividades típicamente femeninas y, en la medida que me reconecté con esto y lo valoricé, fui retomando todas esas cosas. Hoy estoy sufriendo con clases de acuarela, porque se me ocurrió hacer lo más difícil, pero lo estoy disfrutando. Es un desafío personal”, relata.
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